domingo, 9 de enero de 2011

“La Torta y las Migajas”


Daniel Figares.

Mientras escribo estas líneas, en Buenos Aires, trece mil personas ocupan un parque de Villa Soldati.

Como saldo mueren –hasta ahora- entre dos y cuatro personas (es increíble no poder precisar), muchas son heridas… y se produce una excelente muestra de lo que es el vaciamiento del Estado (que se dice ‘progresista’) y su ausencia absoluta cuando lo llaman a sus deberes y obligaciones.

Ni una cosa ni la otra: luchas políticas (Kirchner contra Macri contra Duhalde), represión y absoluta desatención social de la cuestión, transformándola en un puro problema económico…

En Uruguay la situación parece, x ahora, no ser tan grave.

Aunque la crisis es innegable.

Encuestas negativas sobre su popularidad cierran el primer año de gobierno del presidente José Mujica, ex Ministro de Ganadería de la administración Vázquez.

Criticas del Partido Comunista, su principal aliado, a la política económica de este incipiente gobierno.

Denuncias sobre el beneficio que obtienen las clases acomodadas.

Conflictos laborales en la Intendencia Municipal de Montevideo, en la Salud y en la Banca oficial.

Anuncios del vicepresidente Astori sobre “cambios en el Frente Amplio”.
Un congreso sin pena ni gloria y el aparato ‘vazquista’ apretando al máximo con una carta de defensa al comodín de Tabaré Vázquez, el abogado Gonzalo Fernández, luego de que el ex canciller renunciara al Partido Socialista y se resolviera el paso de su caso al Comité de Ética del Frente Amplio (su caso es su actuación en la derogación del artículo 76 de la ley 2.230 –que determinó la clausura del expediente del caso Peirano-. Una actuación PREPONDERANTE, diría yo.).

(Es gracioso como en la carta se invierte la carga de la prueba y se dice que en el FA hay un proceso de “degradación de las relaciones humanas y políticas”… uno REALMENTE CREE que se refieren a Gonzalo Fernández… pero no. Es en su defensa.)

A su vez leo una de las noticias de HOY, en Montevideo Portal:

“El Banco Central dio a conocer este miércoles su Informe Trimestral de Cuentas Nacionales, en el que señala que la economía continuó creciendo en el tercer trimestre del año, acumulando un aumento del 8.8% en los tres primeros trimestres con relación al mismo período de 2009.”

En este contexto es presentado el libro "La torta y las migajas", “en medio de la mayor crisis económica del sistema capitalista de los últimos tiempos, y después de seis años de gobierno progresista”, como dice la gente de la Red de economistas de izquierda del Uruguay (REDIU), en la contratapa.

Las ponencias de los especialistas -todos ellos integrantes del Frente Amplio- incluidas en la obra, cuestionan lo realizado y, a la vez, proponen políticas alternativas.

En el trabajo se proponen realizar:

“Una reflexión sobre las características de este período [el subtitulo del libro es El Gobierno Progresista 2005-2010] desde el punto de vista económico-social.”

Y agregan:

“Luego de analizar los elementos centrales del proceso:
1.    El crecimiento del producto,
2.   El enriquecimiento de los terratenientes y
3.   El predominio del capital extranjero,
4.   La postergación de aspiraciones populares,
5.   El mantenimiento de la desigualdad en la distribución de la riqueza,
La REDIU concluye que el gobierno consolidó en Uruguay un modelo aperturista y desnacionalizador.”

Clarito, ¿no?

Parece que después de haberlo alertado en tiempo y forma (sus libros anteriores “Otro camino económico. Cambios necesarios para el Uruguay productivo” del 2006, y “El necesario golpe de timón” del 2008; sus artículos divulgados en la prensa, acá mismo en Miedo y Asco en Mvd, sin ir más lejos…),… parece que después de alertarlo en tiempo y forma no quedaba otra conclusión que no fuera esta.

Entre el abundante cúmulo de datos e informaciones brindadas en el trabajo podrán ver el gráfico que muestra como la evolución del salario real y el PBI x habitante comienzan en un mismo punto en el año 1993 y se van distanciado, suavemente al principio, fuertemente después de la crisis financiera del 2002, hasta llegar al divorcio completo del 2009, en donde son dos puntos paralelos, alejado uno de otro, siendo el salario real el sumergido y el PBI x habitante lo que esta bien arriba. (Es curioso que la forma en que quedan las líneas en el gráfico se asemeje a las márgenes del Río de la Plata, forma de estuario, como dice la Real Academia Española: “Desembocadura de un río caudaloso en el mar, caracterizada por tener una forma semejante al corte longitudinal de un embudo, cuyos lados van apartándose en el sentido de la corriente”.)

En cuanto a la extranjerización de la economía uruguaya, algunos datos “primarios”, como se publica en el libro, dada la dificultad de obtener información fidedigna.
“Son extranjero/as:
·        La totalidad de la banca privada.
·        Al menos 50% de la faena bovina.
·        La totalidad de la producción de pasta de celulosa.
·        La mayoría de los campos forestales, y una parte esencial de la producción de madera para aserrado y sus plantas procesadoras.
·        La producción de acero.
·        La mayoría de la molinería de arroz y gran parte de la producción del mismo.
·        Prácticamente toda la producción de pan congelado, de molde y de confituras.
·        Una parte no menor al 50% del comercio minorista, a cargo de las grandes superficies comerciales.
·        Millones de hectáreas agropecuarias, con alta intensidad de compra los últimos cinco años.
·        Más de la mitad de la facturación de la telefonía celular.
·        La totalidad de la producción de cervezas y maltas.
·        La absoluta mayoría de las bebidas sin alcohol.
·        El 100% de la comercialización de la soja y sus insumos.
·        La inmensa mayoría de las empresas ubicadas en las trece zonas francas.
·        La única terminal de contenedores del puerto de Montevideo.”

La obra –que invita a ser leída y masticada de cabo a rabo- contiene una segunda parte titulada “Aportes para comprender la etapa actual de desarrollo del país y la región”, en donde se publican distintos documentos.

Es en el primero, “La “izquierda” progresista y el proyecto del capital”, del economista Antonio Elías (miembro de REDIU y Presidente de la Sociedad Latinoamericana de Economía Política y Pensamiento Crítico), en donde se citan algunas conclusiones de un estudio elaborado x Joaquín Etchevers, que bien sirven a manera de sombrío cierre:

Primera conclusión:
Con la crisis que se inicia en 1999 y que se profundiza con la debacle de 2002 hay una pérdida de participación de los salarios y de los ingresos en el PBI en amplísimos sectores de la población.
En los años que van de 2005 a 2009 se ha verificado un pronunciado aumento de la riqueza generada en el país que cada vez más se concentra en pocas manos, consolidando un nuevo escalón descendente propiciado x la crisis y la forma en que se salió de la misma.
Pero la pérdida de importancia de los ingresos del trabajo y otros ingresos excluidos los del capital, viene de larga data.
Ha crecido desde fines de la década de los sesenta y se ha reforzado en los años posteriores a 2002.
En los años de la actual administración no solo se estarían igualando los peores valores de los años PREVIOS a la restauración democrática sino que también, de no haber cambios sustanciales en la política económica, no tendrá modificaciones relevantes.”
Segunda conclusión:
Los altos niveles de pobreza, la pérdida de ingresos de los hogares más pobres y la profunda desigualdad que mantiene el Uruguay, abonan la hipótesis para un futuro cercano del círculo vicioso entre pobreza y bajo crecimiento del PBI.
La convalidación de estos indicadores en un ciclo de alto crecimiento lleva consigo la semilla de futuras crisis y aún mayores injusticias.
Los escandalosos niveles de pobreza entre los niños, no solo son un problema ético, también DESMIENTEN las promesas de mayor bienestar futuro para las mayorías.
Con estos guarismos NO HAY FUTURO FELIZ.”

Tercera conclusión:
La forma de insertarse de Uruguay en la región y el mundo son determinantes del escenario descrito.
Está presente en el país con cada vez mayor incidencia la extranjerización en la toma de decisiones económicas al más alto nivel.
Los privilegios otorgados a la inversión extranjera directa son determinantes.
La pérdida de autonomía nacional en la formación de precios es cada vez MAYOR: la carne, el arroz, la soja, la forestación, los alimentos y su industrialización y el agro en general son algunos ejemplos.
La pérdida de instrumentos imprescindibles para la planificación económica es otra de las manifestaciones de esa falta de un mayor compromiso activo con el desarrollo de parte del equipo económico.
Hay una verdadera DESARTICULACIÓN de redes de proveedores locales.
El ejemplo más claro y de fácil comprensión de ese sometimiento al capital extranjero lo vemos en la política seguida con la deuda pública.
El nivel de deuda pública y su servicio, en un contexto de política económica de sometimiento a los mercados financieros globalizados, CONSOLIDA, CIMIENTA, CON BASES FIRMES, CASI INDESTRUCTIBLES, LA CONCENTRACIÓN DEL INGRESO Y LA POBREZA.” (Las mayúsculas son mías, naturalmente.)

Un sombrío -a la vez que brillante- análisis del espanto que está llegando…

(PD: A propósito de la venta de tierras es bueno recordar que según los datos oficiales del Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca, del 2000 al 2009 se vendieron 6 millones de hectáreas, 36% de los campos agropecuarios, lo que equivale a más de la superficie productiva de 10 departamentos del sur del país: Soriano, Colonia, Flores, San José, Florida, Canelones, Montevideo, Lavalleja, Maldonado y Rocha.)


Ni bien arranca este excelente, imprescindible y muy informativo libro (números duros y fríos, metodología científica certera, compromiso ético, moral e ideológico), el colectivo de especialistas económicos habla sobre las reformas ‘estructurales’ impulsadas x el gobierno de Vázquez, a las que llama “La Implosión Programática”.

“Las reformas más referenciadas x el mismo gobierno fueron:
·        La reforma tributaria,
·        La reforma de la salud y,
·        La tan mentada ‘madre de todas’, la reforma del Estado.”

Aclarando de entrada que ninguna de estas ‘reformas’ aborda los temas clave de la economía de un país como son la producción y sus trabajadores, el sistema financiero y la inserción internacional, la REDIU cuestiona que sean verdaderas reformas estructurales, considerándolas –producto de su correcto análisis- más bien cambios no solo cosméticos, sino para nada ‘progresistas’.

“Es por ello que las englobamos bajo el título de ‘implosión’: por no abordar los temas clave de la economía y por su propio contenido. A esto se redujo el rico y fecundo legado del FA”, dicen los economistas.

LA REFORMA TRIBUTARIA es la que la administración Vázquez tomó como bandera inicial de su gestión.

“Desde el gobierno se hace la lectura de que la caída de los impuestos a las ganancias empresariales de la industria y el comercio (del 30% al 25%), además de algunos descuentos para las pequeñas empresas que incorporan empleo, mejoraron la inversión.
Esta visión rescata también el monto de inversiones en zonas francas (modalidad que se generaliza a todo el país x la Ley de Fomento de Inversiones) que funcionan en un régimen impositivo liberado y la única defensa que cabe son los puestos de trabajo (no solo para los nacionales) que generan.
No obstante el impacto en el empleo es bajo y se reduce a la fase de construcción de instalaciones.” [La producción realizada en zonas francas no debería incluirse como ‘producción nacional’.]

“El impacto de la reforma del sistema tributario en la redistribución del ingreso, a pesar que el eslogan inicial, preelectoral, sostenía que “pagarían más los que TIENEN más”, luego cambiado a “los que GANAN más” a efectos de no gravar la riqueza, es aún más controversial” para la REDIU.

“Atiéndase que el Impuesto a la Renta de las Personas Físicas (IRPF) grava al capital con una tasa plana mientras que respecto a las rentas del trabajo sí es progresiva.
Pero además, la definición particular de las rentas, como ingresos brutos que no permiten deducciones (salvo el pago al fondo de salud x hijos menores) hace al impuesto especialmente regresivo para trabajadores y pasivos.
Las rentas sobre el capital tienen grados de libertad para trasladar los costos impositivos a los precios.
En cambio, las rentas del trabajo son doblemente afectadas x el sistema tributario, ya que el Impuesto al Valor Agregado (IVA) afecta más a quienes gastan todos sus ingresos en consumo y además no permite deducciones ni traslados de costos.
El IVA se redujo un punto en su versión básica (23% a 22%) y cuatro más en la base mínima (14% al 10%), pero se incorporaron al gravamen otros productos antes exentos que, x ser componentes esenciales de la canasta básica, afectan directamente a los trabajadores.” [La leche, para poner un ejemplo.]

“El IRPF operó una redistribución de los ingresos pero con cargo al 10% de la masa salarial que financió la descompresión fiscal para los sectores de ingresos más bajos (TODAVÍA UN 70% DE LOS ASALARIADOS) y la disminución de los impuestos a la actividad económica.
Por su parte, es rescatable que sectores de profesionales antes exentos hoy contribuyan a las arcas del Estado; y, que también los depósitos bancarios de los residentes como los ingresos x alquileres, o las transacciones inmobiliarias que permitan una mejora patrimonial sean ahora gravados.” [Aunque vale la pena recordar que históricamente el patrimonio tenía un impuesto específico. La reforma fiscal del gobierno de Vázquez aprobó eliminar progresivamente este impuesto, que hoy anda en un magrísimo 1,2%.]

Pero la REDIU es lapidaria:

“SI SE ATIENDE A LA RECAUDACIÓN TOTAL DEL NUEVO IMPUESTO (IRPF), ESTA DEPENDE EN UN 87% DE LAS RENTAS DEL TRABAJO (CATEGORÍA I) Y SOLO UN 13% DE LAS RENTAS DEL CAPITAL (CATEGORÍA II), ASUMIENDO LA VISIÓN NEOCLÁSICA DE QUE SOLO DEBEN FINANCIAR AL ESTADO AQUELLOS AGENTES QUE NO AHORRAN (LOS TRABAJADORES Y PASIVOS).”

“El IVA, el más regresivo de los impuestos, sigue explicando MÁS DE LA MITAD DE LA RECAUDACIÓN (53-54%), y se sigue con definiciones que entienden neutros a los impuestos respecto del funcionamiento económico.” (…)

“En definitiva: no corresponde hablar de una ‘reforma estructural’ en materia tributaria, como hace el gobierno.”

LA REFORMA DE LA SALUD, para la REDIU:

“Amplió la base de cobertura del sistema mutual –a costo de bajar el número de quienes se atendían en salud pública-, pero al no atacarse el punto del costo de tiques y órdenes (de medicamentos, consultas, análisis y técnicas de diagnóstico) sucede que el pobre, cuando la enfermedad llega, no puede afrontar los gastos que el mutualismo le cobra.
Vuelta a Salud Pública, o a quedarse sin cobertura.
Mientras tanto no se implementaron mejoras significativas en el sistema público de salud para al menos equipararlo al privado. SEGUIMOS CON UNA SALUD PARA RICOS Y OTRA O NINGUNA PARA LOS POBRES.”

Basada en el ahorro forzoso de los contribuyentes (en especial los trabajadores), la reforma permitió salvar al sistema mutual privado que se venía a pique, gracias al Fondo Nacional para la Salud (FONASA), que le pasa cifras multimillonarias al sector privado, en su mayoría empresas que le facturan al mutualismo o al sistema público amparándose en la posesión de tecnologías de punta.

Como dice la REDIU:

“La mercantilización del sistema goza de buena salud, en tanto los servicios brindados x el sistema de Salud Pública son básicamente utilizados x los que no tienen capacidad de pago.” [Y como ya sabemos la inmensa mayoría de políticos y funcionarios de gobierno y oposición utilizan para sí y para sus familias la salud privada, tanto como la educación privada, en detrimento de lo público.]

En cuanto a LA REFORMA DEL ESTADO, dice la REDIU que:

“Fue entendida x el gobierno no como cambio en la esencia del Estado, (…) sino en lo que refiere a la gestión administrativa, su eficiencia y eficacia.
En este caso, tanto la reforma tributaria como la de la salud son también parte de esta reforma del Estado.
A su vez un conjunto de reordenamientos en la gestión tuvo lugar en varios ministerios o entes públicos” (…) y “varios avances apuntaron a mejorar las relaciones capital-trabajo y tienen que ver con la lucha de los trabajadores organizados, en especial, la vuelta a los Consejos de Salarios, la ley de fueros sindicales (aunque respetada solo con sindicatos fuertes) y la regularización de más de doce mil trabajadores que se encontraban con contratos precarios desde hace mucho tiempo en la administración.
En este último caso, a pesar de tales regularizaciones a instancias de un artículo en la rendición de cuentas, la contratación bajo figuras de contrato chatarra prosiguieron.”

Para la REDIU, esta reforma NO SE PUEDE DENOMINAR “REFORMA ESTRUCTURAL DEL ESTADO” como hace el gobierno.

Señalan también los economistas de izquierda que el haber pasado x un período de bonanza económica (básicamente debido al alza de precios de las materias primas), solo benefició al capital (hay que pensar en la extranjerización de tierras y empresas, en las transnacionales, y que los terratenientes del Uruguay no alcanzan a ser ni el 2% de la población), y que el actual régimen de promoción de inversiones (Ley de Inversiones) transforma a todo el Uruguay en una zona franca. [Esto lo dijo el vicepresidente Astori, palabras más, palabras menos.]

A su vez se pagó la deuda, al FMI se le pagó al contado, y ahora, se alienta la llegada de inversiones privadas para obras públicas (proyecto de ley asociación de públicos y privados), para un país que pasó de tener una inversión extranjera directa de casi 850 millones de dólares en el 2005, a casi 1.150 millones en el 2009 (llegó a los 1.841 millones de dólares en el 2008).

Lo que para el gobierno es un “éxito”, se trata en verdad y x muchas razones, de una CALAMIDAD.

“La desigualdad sigue siendo un tema dramático, ahora reforzado x un creciente sentimiento de frustración (el 45% de los jóvenes aspira a emigrar, según los datos del MIDES).
EL PROYECTO SIGUE SIENDO EL DEL CAPITAL Y, EN EL PERÍODO, EL GOBIERNO CONSOLIDÓ ESA TENDENCIA, SIN INTENTAR COMENZAR A CAMBIAR, A CONSTRUIR ALGO DIFERENTE.”

Ya sabemos que más allá de las ficticias barreras estadísticas la pobreza sigue muy presente en el país.

Ya Tabaré Vázquez hablaba en el 2004 sobre el programa del Frente Amplio y el deseo de terminar con los “alrededor de 250.000 uruguayas y uruguayos [que] viven en lo que eufemísticamente se llaman ‘asentamientos precarios’ (pero llamemos a las cosas x su nombre, son cantegriles, villas miserias).”

Su período como Intendente de Montevideo comenzó en 1990 y como Presidente del Uruguay en el 2005.

HOY –A DÍAS DEL 2011- HAY CASI 257 MIL PERSONAS QUE VIVEN EN CANTEGRILES SEGÚN EL CENSO DE LA ONG “UN TECHO PARA MI PAÍS”.

… Y todavía hay que escuchar al actual senador oficialista y ex subsecretario y ministro de Ganadería, Agricultura y Pesca de la administración Vázquez, Ingeniero Agrónomo Ernesto Agazzi, decir, como conclusiones del octavo congreso del Movimiento de Participación Popular (MPP), que se seguirá con el objetivo de llevar a Uruguay al socialismo y la liberación nacional (¡?)…

DEJATE DE JODER AGAZZI.

¡¡¡NO LE MIENTAN MÁS A LA GENTE!!!

… Sin embargo “EL RUMBO ES ESTE” se encargó de reafirmar el vicepresidente Astori…

(Uno puede entender al 10% de acomodados que se favorecen de la situación y al 10% que los sirve, que es funcionariado, o que forma parte de la ‘corte’, pero… y al otro 80% ¿quién lo entiende?)

 


“La Torta y las Migajas”


Daniel Figares.

Mientras escribo estas líneas, en Buenos Aires, trece mil personas ocupan un parque de Villa Soldati.

Como saldo mueren –hasta ahora- entre dos y cuatro personas (es increíble no poder precisar), muchas son heridas… y se produce una excelente muestra de lo que es el vaciamiento del Estado (que se dice ‘progresista’) y su ausencia absoluta cuando lo llaman a sus deberes y obligaciones.

Ni una cosa ni la otra: luchas políticas (Kirchner contra Macri contra Duhalde), represión y absoluta desatención social de la cuestión, transformándola en un puro problema económico…

En Uruguay la situación parece, x ahora, no ser tan grave.

Aunque la crisis es innegable.

Encuestas negativas sobre su popularidad cierran el primer año de gobierno del presidente José Mujica, ex Ministro de Ganadería de la administración Vázquez.

Criticas del Partido Comunista, su principal aliado, a la política económica de este incipiente gobierno.

Denuncias sobre el beneficio que obtienen las clases acomodadas.

Conflictos laborales en la Intendencia Municipal de Montevideo, en la Salud y en la Banca oficial.

Anuncios del vicepresidente Astori sobre “cambios en el Frente Amplio”.
Un congreso sin pena ni gloria y el aparato ‘vazquista’ apretando al máximo con una carta de defensa al comodín de Tabaré Vázquez, el abogado Gonzalo Fernández, luego de que el ex canciller renunciara al Partido Socialista y se resolviera el paso de su caso al Comité de Ética del Frente Amplio (su caso es su actuación en la derogación del artículo 76 de la ley 2.230 –que determinó la clausura del expediente del caso Peirano-. Una actuación PREPONDERANTE, diría yo.).

(Es gracioso como en la carta se invierte la carga de la prueba y se dice que en el FA hay un proceso de “degradación de las relaciones humanas y políticas”… uno REALMENTE CREE que se refieren a Gonzalo Fernández… pero no. Es en su defensa.)

A su vez leo una de las noticias de HOY, en Montevideo Portal:

“El Banco Central dio a conocer este miércoles su Informe Trimestral de Cuentas Nacionales, en el que señala que la economía continuó creciendo en el tercer trimestre del año, acumulando un aumento del 8.8% en los tres primeros trimestres con relación al mismo período de 2009.”

En este contexto es presentado el libro "La torta y las migajas", “en medio de la mayor crisis económica del sistema capitalista de los últimos tiempos, y después de seis años de gobierno progresista”, como dice la gente de la Red de economistas de izquierda del Uruguay (REDIU), en la contratapa.

Las ponencias de los especialistas -todos ellos integrantes del Frente Amplio- incluidas en la obra, cuestionan lo realizado y, a la vez, proponen políticas alternativas.

En el trabajo se proponen realizar:

“Una reflexión sobre las características de este período [el subtitulo del libro es El Gobierno Progresista 2005-2010] desde el punto de vista económico-social.”

Y agregan:

“Luego de analizar los elementos centrales del proceso:
1.    El crecimiento del producto,
2.   El enriquecimiento de los terratenientes y
3.   El predominio del capital extranjero,
4.   La postergación de aspiraciones populares,
5.   El mantenimiento de la desigualdad en la distribución de la riqueza,
La REDIU concluye que el gobierno consolidó en Uruguay un modelo aperturista y desnacionalizador.”

Clarito, ¿no?

Parece que después de haberlo alertado en tiempo y forma (sus libros anteriores “Otro camino económico. Cambios necesarios para el Uruguay productivo” del 2006, y “El necesario golpe de timón” del 2008; sus artículos divulgados en la prensa, acá mismo en Miedo y Asco en Mvd, sin ir más lejos…),… parece que después de alertarlo en tiempo y forma no quedaba otra conclusión que no fuera esta.

Entre el abundante cúmulo de datos e informaciones brindadas en el trabajo podrán ver el gráfico que muestra como la evolución del salario real y el PBI x habitante comienzan en un mismo punto en el año 1993 y se van distanciado, suavemente al principio, fuertemente después de la crisis financiera del 2002, hasta llegar al divorcio completo del 2009, en donde son dos puntos paralelos, alejado uno de otro, siendo el salario real el sumergido y el PBI x habitante lo que esta bien arriba. (Es curioso que la forma en que quedan las líneas en el gráfico se asemeje a las márgenes del Río de la Plata, forma de estuario, como dice la Real Academia Española: “Desembocadura de un río caudaloso en el mar, caracterizada por tener una forma semejante al corte longitudinal de un embudo, cuyos lados van apartándose en el sentido de la corriente”.)

En cuanto a la extranjerización de la economía uruguaya, algunos datos “primarios”, como se publica en el libro, dada la dificultad de obtener información fidedigna.
“Son extranjero/as:
·        La totalidad de la banca privada.
·        Al menos 50% de la faena bovina.
·        La totalidad de la producción de pasta de celulosa.
·        La mayoría de los campos forestales, y una parte esencial de la producción de madera para aserrado y sus plantas procesadoras.
·        La producción de acero.
·        La mayoría de la molinería de arroz y gran parte de la producción del mismo.
·        Prácticamente toda la producción de pan congelado, de molde y de confituras.
·        Una parte no menor al 50% del comercio minorista, a cargo de las grandes superficies comerciales.
·        Millones de hectáreas agropecuarias, con alta intensidad de compra los últimos cinco años.
·        Más de la mitad de la facturación de la telefonía celular.
·        La totalidad de la producción de cervezas y maltas.
·        La absoluta mayoría de las bebidas sin alcohol.
·        El 100% de la comercialización de la soja y sus insumos.
·        La inmensa mayoría de las empresas ubicadas en las trece zonas francas.
·        La única terminal de contenedores del puerto de Montevideo.”

La obra –que invita a ser leída y masticada de cabo a rabo- contiene una segunda parte titulada “Aportes para comprender la etapa actual de desarrollo del país y la región”, en donde se publican distintos documentos.

Es en el primero, “La “izquierda” progresista y el proyecto del capital”, del economista Antonio Elías (miembro de REDIU y Presidente de la Sociedad Latinoamericana de Economía Política y Pensamiento Crítico), en donde se citan algunas conclusiones de un estudio elaborado x Joaquín Etchevers, que bien sirven a manera de sombrío cierre:

Primera conclusión:
Con la crisis que se inicia en 1999 y que se profundiza con la debacle de 2002 hay una pérdida de participación de los salarios y de los ingresos en el PBI en amplísimos sectores de la población.
En los años que van de 2005 a 2009 se ha verificado un pronunciado aumento de la riqueza generada en el país que cada vez más se concentra en pocas manos, consolidando un nuevo escalón descendente propiciado x la crisis y la forma en que se salió de la misma.
Pero la pérdida de importancia de los ingresos del trabajo y otros ingresos excluidos los del capital, viene de larga data.
Ha crecido desde fines de la década de los sesenta y se ha reforzado en los años posteriores a 2002.
En los años de la actual administración no solo se estarían igualando los peores valores de los años PREVIOS a la restauración democrática sino que también, de no haber cambios sustanciales en la política económica, no tendrá modificaciones relevantes.”
Segunda conclusión:
Los altos niveles de pobreza, la pérdida de ingresos de los hogares más pobres y la profunda desigualdad que mantiene el Uruguay, abonan la hipótesis para un futuro cercano del círculo vicioso entre pobreza y bajo crecimiento del PBI.
La convalidación de estos indicadores en un ciclo de alto crecimiento lleva consigo la semilla de futuras crisis y aún mayores injusticias.
Los escandalosos niveles de pobreza entre los niños, no solo son un problema ético, también DESMIENTEN las promesas de mayor bienestar futuro para las mayorías.
Con estos guarismos NO HAY FUTURO FELIZ.”

Tercera conclusión:
La forma de insertarse de Uruguay en la región y el mundo son determinantes del escenario descrito.
Está presente en el país con cada vez mayor incidencia la extranjerización en la toma de decisiones económicas al más alto nivel.
Los privilegios otorgados a la inversión extranjera directa son determinantes.
La pérdida de autonomía nacional en la formación de precios es cada vez MAYOR: la carne, el arroz, la soja, la forestación, los alimentos y su industrialización y el agro en general son algunos ejemplos.
La pérdida de instrumentos imprescindibles para la planificación económica es otra de las manifestaciones de esa falta de un mayor compromiso activo con el desarrollo de parte del equipo económico.
Hay una verdadera DESARTICULACIÓN de redes de proveedores locales.
El ejemplo más claro y de fácil comprensión de ese sometimiento al capital extranjero lo vemos en la política seguida con la deuda pública.
El nivel de deuda pública y su servicio, en un contexto de política económica de sometimiento a los mercados financieros globalizados, CONSOLIDA, CIMIENTA, CON BASES FIRMES, CASI INDESTRUCTIBLES, LA CONCENTRACIÓN DEL INGRESO Y LA POBREZA.” (Las mayúsculas son mías, naturalmente.)

Un sombrío -a la vez que brillante- análisis del espanto que está llegando…

(PD: A propósito de la venta de tierras es bueno recordar que según los datos oficiales del Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca, del 2000 al 2009 se vendieron 6 millones de hectáreas, 36% de los campos agropecuarios, lo que equivale a más de la superficie productiva de 10 departamentos del sur del país: Soriano, Colonia, Flores, San José, Florida, Canelones, Montevideo, Lavalleja, Maldonado y Rocha.)


Ni bien arranca este excelente, imprescindible y muy informativo libro (números duros y fríos, metodología científica certera, compromiso ético, moral e ideológico), el colectivo de especialistas económicos habla sobre las reformas ‘estructurales’ impulsadas x el gobierno de Vázquez, a las que llama “La Implosión Programática”.

“Las reformas más referenciadas x el mismo gobierno fueron:
·        La reforma tributaria,
·        La reforma de la salud y,
·        La tan mentada ‘madre de todas’, la reforma del Estado.”

Aclarando de entrada que ninguna de estas ‘reformas’ aborda los temas clave de la economía de un país como son la producción y sus trabajadores, el sistema financiero y la inserción internacional, la REDIU cuestiona que sean verdaderas reformas estructurales, considerándolas –producto de su correcto análisis- más bien cambios no solo cosméticos, sino para nada ‘progresistas’.

“Es por ello que las englobamos bajo el título de ‘implosión’: por no abordar los temas clave de la economía y por su propio contenido. A esto se redujo el rico y fecundo legado del FA”, dicen los economistas.

LA REFORMA TRIBUTARIA es la que la administración Vázquez tomó como bandera inicial de su gestión.

“Desde el gobierno se hace la lectura de que la caída de los impuestos a las ganancias empresariales de la industria y el comercio (del 30% al 25%), además de algunos descuentos para las pequeñas empresas que incorporan empleo, mejoraron la inversión.
Esta visión rescata también el monto de inversiones en zonas francas (modalidad que se generaliza a todo el país x la Ley de Fomento de Inversiones) que funcionan en un régimen impositivo liberado y la única defensa que cabe son los puestos de trabajo (no solo para los nacionales) que generan.
No obstante el impacto en el empleo es bajo y se reduce a la fase de construcción de instalaciones.” [La producción realizada en zonas francas no debería incluirse como ‘producción nacional’.]

“El impacto de la reforma del sistema tributario en la redistribución del ingreso, a pesar que el eslogan inicial, preelectoral, sostenía que “pagarían más los que TIENEN más”, luego cambiado a “los que GANAN más” a efectos de no gravar la riqueza, es aún más controversial” para la REDIU.

“Atiéndase que el Impuesto a la Renta de las Personas Físicas (IRPF) grava al capital con una tasa plana mientras que respecto a las rentas del trabajo sí es progresiva.
Pero además, la definición particular de las rentas, como ingresos brutos que no permiten deducciones (salvo el pago al fondo de salud x hijos menores) hace al impuesto especialmente regresivo para trabajadores y pasivos.
Las rentas sobre el capital tienen grados de libertad para trasladar los costos impositivos a los precios.
En cambio, las rentas del trabajo son doblemente afectadas x el sistema tributario, ya que el Impuesto al Valor Agregado (IVA) afecta más a quienes gastan todos sus ingresos en consumo y además no permite deducciones ni traslados de costos.
El IVA se redujo un punto en su versión básica (23% a 22%) y cuatro más en la base mínima (14% al 10%), pero se incorporaron al gravamen otros productos antes exentos que, x ser componentes esenciales de la canasta básica, afectan directamente a los trabajadores.” [La leche, para poner un ejemplo.]

“El IRPF operó una redistribución de los ingresos pero con cargo al 10% de la masa salarial que financió la descompresión fiscal para los sectores de ingresos más bajos (TODAVÍA UN 70% DE LOS ASALARIADOS) y la disminución de los impuestos a la actividad económica.
Por su parte, es rescatable que sectores de profesionales antes exentos hoy contribuyan a las arcas del Estado; y, que también los depósitos bancarios de los residentes como los ingresos x alquileres, o las transacciones inmobiliarias que permitan una mejora patrimonial sean ahora gravados.” [Aunque vale la pena recordar que históricamente el patrimonio tenía un impuesto específico. La reforma fiscal del gobierno de Vázquez aprobó eliminar progresivamente este impuesto, que hoy anda en un magrísimo 1,2%.]

Pero la REDIU es lapidaria:

“SI SE ATIENDE A LA RECAUDACIÓN TOTAL DEL NUEVO IMPUESTO (IRPF), ESTA DEPENDE EN UN 87% DE LAS RENTAS DEL TRABAJO (CATEGORÍA I) Y SOLO UN 13% DE LAS RENTAS DEL CAPITAL (CATEGORÍA II), ASUMIENDO LA VISIÓN NEOCLÁSICA DE QUE SOLO DEBEN FINANCIAR AL ESTADO AQUELLOS AGENTES QUE NO AHORRAN (LOS TRABAJADORES Y PASIVOS).”

“El IVA, el más regresivo de los impuestos, sigue explicando MÁS DE LA MITAD DE LA RECAUDACIÓN (53-54%), y se sigue con definiciones que entienden neutros a los impuestos respecto del funcionamiento económico.” (…)

“En definitiva: no corresponde hablar de una ‘reforma estructural’ en materia tributaria, como hace el gobierno.”

LA REFORMA DE LA SALUD, para la REDIU:

“Amplió la base de cobertura del sistema mutual –a costo de bajar el número de quienes se atendían en salud pública-, pero al no atacarse el punto del costo de tiques y órdenes (de medicamentos, consultas, análisis y técnicas de diagnóstico) sucede que el pobre, cuando la enfermedad llega, no puede afrontar los gastos que el mutualismo le cobra.
Vuelta a Salud Pública, o a quedarse sin cobertura.
Mientras tanto no se implementaron mejoras significativas en el sistema público de salud para al menos equipararlo al privado. SEGUIMOS CON UNA SALUD PARA RICOS Y OTRA O NINGUNA PARA LOS POBRES.”

Basada en el ahorro forzoso de los contribuyentes (en especial los trabajadores), la reforma permitió salvar al sistema mutual privado que se venía a pique, gracias al Fondo Nacional para la Salud (FONASA), que le pasa cifras multimillonarias al sector privado, en su mayoría empresas que le facturan al mutualismo o al sistema público amparándose en la posesión de tecnologías de punta.

Como dice la REDIU:

“La mercantilización del sistema goza de buena salud, en tanto los servicios brindados x el sistema de Salud Pública son básicamente utilizados x los que no tienen capacidad de pago.” [Y como ya sabemos la inmensa mayoría de políticos y funcionarios de gobierno y oposición utilizan para sí y para sus familias la salud privada, tanto como la educación privada, en detrimento de lo público.]

En cuanto a LA REFORMA DEL ESTADO, dice la REDIU que:

“Fue entendida x el gobierno no como cambio en la esencia del Estado, (…) sino en lo que refiere a la gestión administrativa, su eficiencia y eficacia.
En este caso, tanto la reforma tributaria como la de la salud son también parte de esta reforma del Estado.
A su vez un conjunto de reordenamientos en la gestión tuvo lugar en varios ministerios o entes públicos” (…) y “varios avances apuntaron a mejorar las relaciones capital-trabajo y tienen que ver con la lucha de los trabajadores organizados, en especial, la vuelta a los Consejos de Salarios, la ley de fueros sindicales (aunque respetada solo con sindicatos fuertes) y la regularización de más de doce mil trabajadores que se encontraban con contratos precarios desde hace mucho tiempo en la administración.
En este último caso, a pesar de tales regularizaciones a instancias de un artículo en la rendición de cuentas, la contratación bajo figuras de contrato chatarra prosiguieron.”

Para la REDIU, esta reforma NO SE PUEDE DENOMINAR “REFORMA ESTRUCTURAL DEL ESTADO” como hace el gobierno.

Señalan también los economistas de izquierda que el haber pasado x un período de bonanza económica (básicamente debido al alza de precios de las materias primas), solo benefició al capital (hay que pensar en la extranjerización de tierras y empresas, en las transnacionales, y que los terratenientes del Uruguay no alcanzan a ser ni el 2% de la población), y que el actual régimen de promoción de inversiones (Ley de Inversiones) transforma a todo el Uruguay en una zona franca. [Esto lo dijo el vicepresidente Astori, palabras más, palabras menos.]

A su vez se pagó la deuda, al FMI se le pagó al contado, y ahora, se alienta la llegada de inversiones privadas para obras públicas (proyecto de ley asociación de públicos y privados), para un país que pasó de tener una inversión extranjera directa de casi 850 millones de dólares en el 2005, a casi 1.150 millones en el 2009 (llegó a los 1.841 millones de dólares en el 2008).

Lo que para el gobierno es un “éxito”, se trata en verdad y x muchas razones, de una CALAMIDAD.

“La desigualdad sigue siendo un tema dramático, ahora reforzado x un creciente sentimiento de frustración (el 45% de los jóvenes aspira a emigrar, según los datos del MIDES).
EL PROYECTO SIGUE SIENDO EL DEL CAPITAL Y, EN EL PERÍODO, EL GOBIERNO CONSOLIDÓ ESA TENDENCIA, SIN INTENTAR COMENZAR A CAMBIAR, A CONSTRUIR ALGO DIFERENTE.”

Ya sabemos que más allá de las ficticias barreras estadísticas la pobreza sigue muy presente en el país.

Ya Tabaré Vázquez hablaba en el 2004 sobre el programa del Frente Amplio y el deseo de terminar con los “alrededor de 250.000 uruguayas y uruguayos [que] viven en lo que eufemísticamente se llaman ‘asentamientos precarios’ (pero llamemos a las cosas x su nombre, son cantegriles, villas miserias).”

Su período como Intendente de Montevideo comenzó en 1990 y como Presidente del Uruguay en el 2005.

HOY –A DÍAS DEL 2011- HAY CASI 257 MIL PERSONAS QUE VIVEN EN CANTEGRILES SEGÚN EL CENSO DE LA ONG “UN TECHO PARA MI PAÍS”.

… Y todavía hay que escuchar al actual senador oficialista y ex subsecretario y ministro de Ganadería, Agricultura y Pesca de la administración Vázquez, Ingeniero Agrónomo Ernesto Agazzi, decir, como conclusiones del octavo congreso del Movimiento de Participación Popular (MPP), que se seguirá con el objetivo de llevar a Uruguay al socialismo y la liberación nacional (¡?)…

DEJATE DE JODER AGAZZI.

¡¡¡NO LE MIENTAN MÁS A LA GENTE!!!

… Sin embargo “EL RUMBO ES ESTE” se encargó de reafirmar el vicepresidente Astori…

(Uno puede entender al 10% de acomodados que se favorecen de la situación y al 10% que los sirve, que es funcionariado, o que forma parte de la ‘corte’, pero… y al otro 80% ¿quién lo entiende?)