sábado, 16 de abril de 2011

mira pepe


“ MIRÁ  PEPE,  EL “CHICLE” SE USA  Y  SE TIRA, ¿ O  NO ? ”
Noriega,  Husein, Gadafi, etcétera, etcétera, etcétera, etcétera…
Estos son solamente tres nombres de una pléyade de nombres de tipejos que sufrieron del síndrome del “YO SOY PODEROSO”, “YO TENGO EL PODER”, cuando en realidad no eran más que unos simples y desgraciados chicles y alcahuetes del  imperio, el chicle se usa y se tira, siempre, desde los confines de la historia y con los alcahuetes sucede también lo mismo y si no solamente recordemos, nada más recordemos, Pepe.
Digo esto por que entre vos, Pepe y el otro “patriota” de Tabaré, transformaron como por arte de birlibirloque a lo poco que blancos y colorados dejaron de la ex República Oriental en la actual “ Provincia Oriental”.  La palabra provincia deriva del latín, provinciti  es decir “lugar donde viven los vencidos”, somos vencidos sin haber luchado, somos vencidos, por que tenemos la desgracia de tener políticos en el poder, sin una pizca de orgullo, de amor por la Patria, somos vencidos por el síndrome de “yo soy poderoso” cuando en realidad sólo son chicles y alcahuetes del imperio.
Es en virtud de todo que tenemos tratados comerciales que nos avergüenzan y ahora tenemos un tratado militar que nos denigra que nos humilla como personas.  ¿Acaso ya no es suficiente con el hacernos sentir la humillación de la misiones de paz?  Que no son otra cosa que permisos de corsario, pero para que otros roben a pueblos sumidos en el hambre, la miseria y la desesperación.  Si realmente queremos ayudar a un pueblo en esas condiciones, tendríamos que mandar médicos,  maestros y técnicos agrícolas, como hace esa Cuba que según ustedes se cae a pedazos, esa es la mejor ayuda que se le puede dar a un pueblo en dificultades.  No soldados que han sido instruidos nada más que para destruir y nada mas, por que ese es el objetivo de los militares, destruir al enemigo, solamente eso, nunca construir cosa alguna.
Será por esa razón que ahora hacemos éste convenio con los EEUU., para que terminen de destruir lo poco que ya le va quedando a éste mi pueblo de aquellas glorias que en el pasado, cada vez mas lejano e irretornable supimos tener y baste recordar con unos pocos nombres nuestras glorias, Vaz Ferreira, Rodó, Varela, Fabini, Juana De Ibarbourou, Blanes, Torres Garcia …   Todo eso se logró teniendo gente pensante, gente culta, gente que no empuñó armas, gente que empuñó pinceles, cuadernos de música, lápices, por que su cerebro fue capacitado para la felicidad del pensamiento útil.
Lo que los Oriéntales tenemos y queremos recibir es conocimiento, conocimiento en serio, capacitarnos, educarnos en la sensibilidad de las Artes, desarrollar el conocimiento en las diferentes ciencias, para contribuir a la felicidad de nuestro pueblo con mejor calidad de vida, una calidad de vida basada en el humanismo y no en el militarismo,  que a través de la historia de la humanidad solo ha dejado dolores, pobreza, miseria, angustias y sometimiento de los pueblos, muertos y lágrimas.  En definitiva nada mas.
Pero veamos a éste problema desde otro ángulo, los norteamericanos en estas reuniones, nos tratan de halagar con frases rimbombantes llenas de elogios, diciéndonos que ellos han aprendido que tienen que escuchar al otro por que tienen también que aprender, y bla, bla, bla…   Pensemos: se le puede creer algo a quién siempre ha mentido absolutamente en todo, pero en todo, se puede pensar que ahora es honesto, quién hasta éste mismo momento, usa del robo, la rapiña, las guerras preventivas, los golpes de estado, la corrupción, la droga y cualquier otra cosa para lograr sus fines, sin importarle de las consecuencias que el otro pueda sufrir, incluso su propia gente, por que miremos como está el pueblo de los EEUU. Sufriendo desempleo, carestía, perdiendo sus casas, con grandes problemas para obtener salud, aunque sea de mala calidad,  que habría que pensar si eso es salud.
Sin embargo, acá nuestro gobierno, ¿o desgobierno? Nos entrega atados de pies y manos a la infamia y a la degradación mediante un tratado militar de consecuencias coloniales con estos individuos, que son lo peor de la historia de la humanidad y a las pruebas me remito; por que ni los romanos con toda la brutalidad que los caracterizaba en sus épocas imperiales pueden compararse  con la actualidad brutal de este imperio de muerte.

Pero mire COMPA, después de los romanos, sus alcahuetes, sus forros sus conquistas y todo lo demás vino el RENACIMIENTO.   Yo se que si lucho sin claudicar, todos los días, todas la horas todavía tengo tiempo de ver nuestro RENACIMIENTO.  Compa desde acá humildemente lo convoco LUCHE; LUCHE; LUCHE Y LUC

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